Adiós al raciocinio y a la comprensión
a Madrid y Roma, nunca estuve en París
al sexo en el ascensor, a la lujuria y la pasión
a los colores de la playa ahora sólo veo el gris
Adiós a los viajes y las estancias en el sofá
a las cenas con velas y la mistela para el final
a la princesa cosmopolita que fue mi ninfa
a las travesías en coche y esa canción de Amaral
Adiós a Étienne y a las medias sin fin
al juego mixto y a los post-its con información
a los anillos en el pulgar y los estados de placidez
Adiós a mi presunta victoria, perdí mi botín
adiós a los derechos de un mundo sin Garzón
a los findes de locura con cultura, a mi estupidez
Tanca cercles i, sobretot, no tornes a obir triangles
ResponderEliminarDe ese triángulo no sólo yo fui el culpable
ResponderEliminarWendy, para irse a la cama hacen falta dos pero, por favor, acuérdate de llevarte el tanta puesto la próxima vez. Hay que ser mala y querer hacer daño...
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