lunes, 30 de mayo de 2011

Reinserción

     Después de darte cuenta que te has equivocado de camino, después de mirar los mapas y tomar la ruta correcta, después de pasar por donde ya habías pasado pero al revés, después de asegurarte que no te vas a volver a perder, después de pedir perdón a la tripulación por las molestias, después de asumir el error, después de perdonarte a ti mismo, después de aceptar el error y la penitencia... ¿Qué más tiene que hacer uno? ¿Llevar siempre la letra escarlata en el pecho? No soy partidario de eso, creo en el arrepentimiento y la reinserción. Cuando uno reconoce el error y toma medidas para no volver a cometerlo, debería tener una segunda oportunidad.

     Basta de vivir con miedo, basta de tener vergüenza. Asumo la responsabilidad sobre mi mismo y mis actos. Nadie más determina lo que yo pienso, siento y hago, basta de excusas. Yo soy quien configura mi propia vida. Mi pasado es mio, hay momentos que no volvería a repetir, pero forman parte de mi vida y tengo que vivir con ello. Lo que soy y la manera en que puedo cambiar está íntimamente relacionado con lo que fui y con lo que fue. Mis expectativas determinan en algún modo lo que está por venir. Tengo un futuro por delante y lo más importante tengo un presente, que quiero vivirlo y disfrutarlo. Quiero recibir cada día como si fuese el último. Primordialmente quiero vivir.

    De algún modo mis actos convencerán a mis detractores, escépticos y gente sin fe.

1 comentario:

  1. M'agrada eixa actitud. Bonica cançó. Crec haver-la emprada en alguna ocasió...

    ResponderEliminar